[HACK] INTIMIDADES DE UN VIEJO ESPIA ARREPENTIDO
Alejandro
elalearg at hotmail.com
Mon Mar 12 18:22:54 CET 2007
Aquí les envió, una investigación de la revista Noticias de Argentina,
es una revista que se caracteriza por su independencia y excelencia en sus
investigaciones. Creo que tiene mucho que ver con el tema que se ha tratado
esta ultima semana en la lista. (K= KIRCHNER, SIDE = Secretaria de
inteligencia del estado, ñoquis = personas que reciben una remuneración pero
no trabajan )
Saludos.
INTIMIDADES DE UN VIEJO ESPIA ARREPENTIDO
Ariel Garbarz es un ingeniero electrónico y consultor especializado en
protección de líneas telefónicas que conoce todos los secretos de "última
generación" en materia de espionaje. Hastiado de los manejos del entorno K,
este presunto colaborador de la inteligencia kirchnerista reveló pormenores
de los manejos de la Side en la Argentina. Según Garbarz hay 48 mil líneas
de teléfonos pinchadas para monitorear a opositores como Elisa Carrió y
Roberto Lavagna y Felipe Solá, los teléfonos de la Cámara de Diputados y la
Legislatura porteña... "Estoy enojado con el entorno del Presidente. Yo lo
voté, al principio creo que apoyaba nuestro proyecto en la UBA. Pero está
rodeado de autoritarios y de corruptos, de gente que se cree que te puede
patotear", aseguró Garbarz quien confesó que hasta lo amenazaron de muerte.
Hasta el mismísimo ministro de Planificación, Julio De Vido, propuso pagarle
por su trabajo en forma irregular, mediante el nombramiento de empleados
"ñoquis", y que tras su negativa fue amenazado de muerte.
Otro de los funcionarios K que lo intimidó fue Guillermo Moreno.
El secretario de Comercio Interior lo acusó por divulgar telefonos de gente
que protege el gobierno:
"Empezamos mal. Te va a llamar alguien del Batallón 601 del Ejército para
ver la tecnología que usás".
Garbarz es director del Proyecto Nacional de Teleinformática de la
Universidad de Buenos Aires (UBA) y viejo conocido de los espías de la Side,
a los que asesoró en tiempos de Fernando De la Rúa y ahora volvió a
frecuentar desde que Néstor Kirchner ocupa el poder.
En una nota publicada por Seprin en el año 2000 sobre la red Echelon, de
escuchas electrónicas y liderada por EE.UU., Garbarz mostraba su expertise
en protección de líneas telefónicas.
Aseguró que tenía contratos con esa cartera y la de Salud, y que además
había comprobado que 21 líneas de Economía estaban intervenidas, vía
satélite desde el exterior, con la misma tecnología que utiliza Echelon.
El ingeniero aseguró que realizó un chequeo de las líneas del por entonces
ministro José Luis Machinea, de sus secretarios y subsecretarios. En ese
procedimiento, dijo, se comprobó que la computadora interceptora es de la
firma AST, uno de los dos proveedores de la ultrasecreta National Security
Agency, la agencia estadounidense que controla el Echelon.
Esa terminal, de la que también obtuvieron el número de serie, trabajaba por
ese entonces con el software STG, que permitía intervenir comunicaciones
telefónicas, e-mail y de fax, a través de fibra óptica, de cable y de
satélite.
Garbarz aclaró que este sistema sólo podían comprarlos agencias de espionaje
autorizadas por el Departamento de Estado norteamericano. En la Argentina,
la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) es el único organismo
autorizado legalmente a contar con ese software.
En la entrevista concedida a Noticias, Garbarz revela un viejo truco: el
riesgo de que un celular encendido se transforme en micrófono ya era posible
hace al menos siete años...
En 2003, Seprin publicó un extenso artículo titulado "Una victoria para la
Nación: la Side le sacó las computadoras a Garbarz".
En aquel momento, la Side dejó a Garbarz sin las computadoras con tecnología
Comsec Carrier siguiendo las recomendaciones de Seprin, aunque los teléfonos
del Gobierno siguieron bajo control de Garbarz...
"El 4/6/03 desde las 13.20 hs la tecnología israelí Comsec Carrier tiró
abajo el sistema de protección de la red de celulares encriptados de
Presidencia de la Nación cedidos por la empresa Motorola".
Finalmente, como lo anticipáramos, el Ingeniero Garbarz tomó control externo
de la protección de 90 teléfonos móviles y fijos que utilizan el Presidente,
sus Ministros y Secretarios, dejando fuera de funcionamiento el sistema de
encriptación de Movicom- Motorola que durante más de siete años y varios
gobiernos demostró su efectividad contra el espionaje foráneo. Espionaje
denunciado por el Parlamento Europeo bajo el proyecto Echelon y detectado en
el año 2001 por prestigiosos ingenieros investigadores de la UTN bajo las
órdenes de Garbarz.
Cuando tomó estado público el espionaje de nuestros gobernantes y su
seguimiento satelital desde la National Security Agency, Movicom cambió los
números asignados a los celulares de Presidencia, al menos para cubrir las
apariencias.
No es nuestra intención defender la tecnología de Movicom frente a la del
Mossad. No debemos permitir el espionaje y/ó control digital sobre el
gobierno que hemos elegido los argentinos, venga de Israel, de USA o de
donde sea. Insistimos en que cualquiera sea su origen debe estar bajo
estricto control del Estado y de la SIDE. No vamos a dejar de reconocer la
gran capacidad técnica de Garbarz (mayormente adquirida en el Techknion del
Mossad), su carrera docente en la UBA y la UTN y su extenso curriculum
publicado. Pero sus méritos profesionales y académicos son un agravante en
la medida que no están al servicio de nuestra Nación. Agravan aún más el
hecho comprobado y admitido por el propio Garbarz de haber trabajado para
Israel y para su propio beneficio.
Se trata de un individuo con mucho poder. Como perito de la DAIA consiguió
convencer a la Corte Suprema de que allane el epartamento de Policía, logró
que el juez Urzo allane Telefónica, Telecom y la SIDE seis veces y sacarle a
la DOJ-SIDE los equipos de escucha Siemens usados legalmente, privándole
durante meses a la Justicia de investigar cientos de teléfonos.
Se ganó popularidad como ingeniero periodista del diario izquierdista Página
12 denunciando los contratos de IBM, el rebalanceo telefónico, usando su
Excálibur contra el menemismo.
El ingeniero Ariel Garbarz donó a la UTN el programa de computación que
abrió las puertas de las investigaciones fue más allá en sus especulaciones:
"puede ser espionje de la agencia nacional de seguridad norteamericana que
espía a la Argentina. No creo que haya sido la SIDE porque no tiene estos
aparatos", opinó.
La empresa norteamericana Applied Signal Technology Inc. (AST) es una de las
proveedoras exclusivas de este equipamiento a la National Security Agency
(NSA) de los Estados Unidos. Los equipos que estarían interceptando llamadas
en la Argentina fueron fabricados por esa firma.
No hay que olvidar el enfrentamiento que tuvieron los Estados Unidos con la
Unión Europea cuando este bloque político-económico descubrió que los
norteamericanos habían desplegado un sistema de espionaje industrial
conocido como el Echelon que mereció el total repudio por parte de los
países europeos. En el Echelon se utilizaban equipos AST con enlace
satélital.
Más detalles en
http://www.seprin.com/menu/notas3750.htm
"El gobierno argentino tiene en su poder un software gratuito que
desarrollamos en la Universidad de Buenos Aires (UBA), destinado a proteger
a todos los teléfonos fijos y móviles de las escuchas ilegales. Pero no hay
decisión política de ponerlo en práctica; sólo lo usan el Presidente de la
Nación, funcionarios del Poder Ejecutivo y directivos de grandes empresas,
mientras se niega al resto de la ciudadanía el derecho a la privacidad en
las telecomunicaciones", aseguró el ingeniero Ariel Garbar. "Hay 18 mil
líneas telefónicas espiadas en el país".
"Néstor Kirchner nos pidió apenas asumió, el 25 de mayo de 2003, que
instaláramos en sus celulares, en los de los ministros del Poder Ejecutivo e
inclusive en móviles de los jefes de la Side, el software que desarrollamos
en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y en la UBA que se llama
DBA.exe, y que bloquea equipos interceptores digitales. Desde entonces, hace
más de 3 años, esas líneas están protegidas".
"En el caso de los empresarios que lo están utilizando, que cada vez son más
y de grandes empresas, no pagan porque el software es gratuito, es de
dominio público porque fue donado al Estado argentino. No se comercializa.
Lo que pagan es el servicio de instalación y utilización del software".
"El eje principal del proyecto nacional de Seguridad Tele-Informática, de la
UBA, es la protección de todas las redes de todos los teléfonos fijos y
celulares por parte del Estado. Y es por eso que nosotros le hemos donado el
software, se lo entregamos en mano al ministro de Infraestructura Julio De
Vido. El tema es que todavía no hay decisión política de que sea instalado
en todas las redes de telefonía".
"El Estado debe garantizar el derecho a la privacidad en las
telecomunicaciones, y en el proyecto está especificado claramente que se
puede financiar con un impuesto que se le cobraría a las empresas que están
haciendo uso de ese servicio, con lo cual el costo sería cero para el Estado
y para todos los usuarios particulares de la República Argentina. Pero
parece que no hay interés político".
"Hay una verificación en forma pericial que detectó 4 sistemas satelitales,
DVCRAU, que son unidades de captura, y cada uno de ellos estaba
monitoreando, grabando, almacenando, 12 mil teléfonos fijos y celulares.
Hemos contabilizado 48 mil teléfonos "pinchados" en la Argentina".
El ingeniero Garbarz, además, detectó la "intervención" ilegal de
líneas telefónicas de opositores argentinos como Mauricio Macri -titular de
la centroderechista Compromiso para el Cambio y del club de fútbol Boca
Juniors-, la "progresista" Elisa Carrió (ARI) y el ex ministro de Economía
Roberto Lavagna, hoy alentado por sectores peronistas y radicales que no
comulgan con el kirchnerismo.
"El gobierno tiene en su poder un software gratuito que desarrollamos en la
UBA destinado a proteger a todos los teléfonos fijos y móviles de las
escuchas ilegales. Pero no hay decisión política de ponerlo en práctica;
sólo lo usan el Presidente de la Nación, funcionarios del Poder Ejecutivo y
directivos de grandes empresas, mientras se niega al resto de la ciudadanía
el derecho a la privacidad en las telecomunicaciones. Según una pericia
judicial, hay 48 mil líneas pinchadas en la Argentina".
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